Sesión de acompañamiento
En nuestra sesión del plan de acompañamiento emocional, hemos hablado de las miradas. Os dejamos un pequeño texto sobre la importancia de mirarnos a los ojos, en estos tiempos raros, para seguir cuidándonos:
También somos una suma de miradas. La ojera que plantea una mala noche, la complicidad que nos acerca, el miedo a un desencuentro que se hace inevitable, el cansancio de un rostro derrotadoen alguna mañana y el brillo inevitable que nos deja una ilusión. Esa ilusión que refleja la noche en el iris.
Claro que estamos cansados de comunicarnos solo con miradas, porque son más especiales nuestros rostros completos, el complemento sonrisa y poder corroborar con un gesto lo que nuestras palabras ya dicen.
Claro que estamos cansados de que en ocasiones la mascarilla se suba y moleste a nuestras pestañas, de que nuestros ojos se sientan solos y a menudo desamparados en el hecho inevitable de comunicarnos, pero, a pesar de estar solas –nuestras miradas- son capaces de decir tanto que sería un desperdicio que no nos miráramos, de vez en cuando, a los ojos, y reconociéramos las complicidades pasadas, las ilusiones latentes…
Identificar nuestras emociones y hacer un barrido por todos los momentos compartidos que tú y yo llevamos con nosotros.
Porque, a pesar de todo, tú también lo has conseguido: tú también has aprendido a sonreír con la mirada.
Gracias por seguir mirándonos a los ojos durante este segundo trimestre.